Cinema Paradiso, de Giuseppe Tornatore

26 diciembre, 2013

| | |
Cinema Paradiso es una de esas películas que te roban el corazón y que emociona aún más en unas fechas tan entrañables como en las que nos encontramos. Derrocha un amor incondicional hacia el cine, por parte de sus protagonistas , ya que la trama principal se desarrolla alrededor de un humilde cine local: el Cinema Paradiso. Giuseppe Tornatore, su director, es el responsable de este gran homenaje al séptimo arte con una de las mayores joyas cinematográficas de los últimos veinticinco años, plasmando cada detalle y cada sentimiento vivido en un cine, desde la historia de un proyeccionista hasta las reacciones que experimentan sus espectadores.


La mayor parte de la película tiene lugar en el pasado, desde el recuerdo infantil de Salvatore, conocido desde su infancia como Totó, que se desarrolla poco después de la Segunda Guerra Mundial. A modo de flashback recuerda su inquieta y mágica infancia y posterior juventud en el pequeño pueblo de Giancaldo (Sicilia). En él llegaría a trabajar en la cabina del cine local, forjándose una amistad inquebrantable con el responsable de la misma, Alfredo, una persona solitaria y entrañable que tratará a Totó como si fuera el hijo que nunca tuvo. Totó es un hijo travieso pero muy inteligente de una viuda de guerra y, a sus seis años, descubriría su amor por el mundo del cine. Así, pasó todo el tiempo que pudo en el cine local, Cinema Paradiso, entablando una bonita relación casi paterno-filial con el proyeccionista que crecería y se mantendría a pesar de la distancia. Pasaron los años y, con ellos, la vida, el cine y el amor, pero sin perder nunca la pasión por el séptimo arte.

-Hagas lo que hagas, ámalo, como amabas la cabina del Paradiso.
Alfredo al joven Totó


Un hecho que se muestra de forma curiosa durante gran parte de la película es la censura característica de la época en lo que al cine se refiere. Y es que en las escenas de varias de las películas emitidas en el Cinema Paradiso hay frecuentes abucheos de la audiencia debido a la feroz censura. Las películas de repente saltaban abruptamente, eludiendo las escenas más comprometidas, aunque se tratasen de simples besos o abrazos. Aunque, en este caso, Alfredo no se deshizo de estas escenas, guardando cuidadosamente estas diapositivas en su cabina.


Otro aspecto a destacar en Cinema Paradiso es lo bien retratado y mostrado que aparece el paso del tiempo, narrando tres épocas distintas de una misma vida y en un mismo lugar. Cuando nuestro protagonista aparece siendo niño, la historia está llena de momentos cómicos muy típicos del cine italiano y desprendiendo alegría, felicidad e inquietud contagiosas. Cuando Totó ya es todo un adolescente, el amor marca un punto de inflexión en su vida, conociendo a la mujer que le robaría el corazón para siempre, Elena (Agnese Nano). En su etapa adulta, volveremos al presente y a su vuelta a ese pueblo tan importante para él, en el que descubrirá que el tiempo pasa para todos por igual y que nuestro fin es irremediable, como lo es el fin que sufre Cinema Paradiso. Sin duda, tres partes muy bien diferenciadas e intercaladas de forma sublime, todo ello con algunos planos emotivos del protagonista y su recuerdo.


Mención especial también merece el reparto del film; Philippe Noiret como Alfredo. en el que, probablemente, fuera el papel más importante de su carrera, pasando por un inquieto y expresivo Salvatore Cascio, que interpreta a Totó niño, y Marco Leonardi, el apuesto y sensible adolescente que encarna al Totó joven, terminando, así, en Jacques Perrin que interpreta a Totó adulto, persona seria y en cuyo aspecto se ve cómo han pasado los años para aquel joven enamorado del cine. Todos ellos brillan notablemente en la época que les tocó vivir, acompañados magistralmente por la banda sonora, a cargo del gran Ennio Morricone. 


Por otra parte, la película originalmente tenía un metraje de 155 minutos, pero, debido a su bajo éxito inicial en Italia, se acortó a 123 minutos para su estreno internacional. En las escenas eliminadas, un Salvatore ya adulto se reencontraría con Elena (en este caso, interpretada por Brigitte Fossey), su amor de la adolescencia. Pese a su humilde comienzo, fue ganadora de infinidad de premios, destacando el Gran Premio Especial del Jurado en el Festival de Cannes (1989), un Globo de Oro a la mejor película extranjera (1990) y un Oscar a la mejor película de habla no inglesa (1989), entre otros.


El enorme amor que Cinema Paradiso demuestra hacía el séptimo arte es, sin duda, uno de los mayores homenajes hacia el cine que se hayan hecho jamás. Porque el cine fue, es y será siempre, algo más de lo que vemos; algo con lo que transmitir valores cotidianos, capaz de emocionar y evocar sentimientos como el amor, la amistad o el coraje. Porque Alfredo siempre quiso inculcar amor en Totó, amor incondicional por todo lo que hiciera en su vida. Porque el amor es la base de todo, y pocas veces en una película los besos adquirieron tanto significado, siendo la forma más importante de transmitir amor. Mensajes que, aún más en estas fechas, son tan necesarios y esperanzadores para todos nosotros.


Escrito por Mariela B. Ortega


0 comentarios :

Publicar un comentario

¡Hola! Si te gusta el tema del que estamos hablando en esta entrada, ¡no dudes en comentar! Estamos abiertos a que compartas tu opinión con nosotros :)

Recuerda ser respetuoso y no realizar spam. Lee nuestras políticas para más información.

Lo más visto esta semana

Aviso Legal

Licencia Creative Commons

Baúl de Castillo por Baúl del Castillo se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.

Nuestros contenidos son, a excepción de las citas, propiedad de los autores que colaboran en este blog. De esta forma, tanto los textos como el diseño alterado de la plantilla original y las secciones originales creadas por nuestros colaboradores son también propiedad de esta entidad bajo una licencia Creative Commons BY-NC-ND, salvo que en el artículo en cuestión se mencione lo contrario. Así pues, cualquiera de nuestros textos puede ser reproducido en otros medios siempre y cuando cuente con nuestra autorización y se cite a la fuente original (este blog) así como al autor correspondiente, y que su uso no sea comercial.

Dispuesta nuestra licencia de esta forma, recordamos que cualquier vulneración de estas reglas supondrá una infracción en nuestra propiedad intelectual y nos facultará para poder realizar acciones legales.

Por otra parte, nuestras imágenes son, en su mayoría, extraídas de Google y otras plataformas de distribución de imágenes. Entendemos que algunas de ellas puedan estar sujetas a derechos de autor, por lo que rogamos que se pongan en contacto con nosotros en caso de que fuera necesario retirarla. De la misma forma, siempre que sea posible encontrar el nombre del autor original de la imagen, será mencionado como nota a pie de fotografía. En otros casos, se señalará que las fotos pertenecen a nuestro equipo y su uso queda acogido a la licencia anteriormente mencionada.

Safe Creative #1210020061717